En el corazón de la provincia de Córdoba, el pequeño pueblo de Devoto es máxima referencia de la economía social y solidaria y del trabajo colectivo. Un esfuerzo conjunto que tiene como objetivo no solo mejorar la vida cotidiana de sus habitantes, sino también fomentar la participación activa de todos los sectores de la comunidad. Y un mojón en esa construcción es la Sociedad Cosmopolita de Socorros Mutuos, integrada junto a otras entidades solidarias en el Grupo Mutual Cooperativo de Devoto.

“Hoy contamos con casi 600 empleados, y a pesar de ser un pueblo chico, no hay un joven que no tenga la oportunidad de trabajar. Todo esto nació con una misión: generar trabajo para que los chicos que terminan la secundaria tengan un lugar donde insertarse”, asegura el gerente general del Grupo Mutual Cooperativo de Devoto, Agustín Benso.

Este trabajo se ve reflejado en una serie de iniciativas que abarcan desde la producción y la educación hasta la prestación de servicios básicos. La comunidad cuenta con actividades como la fabricación de bolsas, la provisión de agua potable, telefonía móvil y hasta el servicio de cable. Además, a través de convenios con otras instituciones, se brindan servicios turísticos y educativos a la población.

A lo largo de los años, este modelo ha permitido que el grupo se expanda a varias localidades cercanas, como San Francisco, San Bartolo, Luque, y Río Cuarto. Además, el impacto de su trabajo se extiende a diversas áreas, desde el turismo hasta la salud, con el establecimiento de farmacias y servicios médicos, siempre buscando el bienestar de quienes habitan en estos pequeños pueblos.

Uno de los puntos más destacables de este esfuerzo es su enfoque inclusivo. “En Devoto no hay un chico con discapacidad que no trabaje”, comenta el joven gerente. El trabajo no solo incluye a los jóvenes y adultos, sino también a personas con capacidades diferentes, a quienes se les ofrece la posibilidad de integrarse a la vida activa de la comunidad. Además, hay una panificadora en la que los productos son elaborados por personas con discapacidad, quienes se encargan de la producción y distribución de estos artículos.

En cuanto a los proyectos a futuro, el esfuerzo por brindar los servicios básicos no se detiene. El grupo está trabajando junto al municipio en un proyecto de gas natural y cloacas, dos servicios que aún no están disponibles en el pueblo. “Es la primera vez que vamos a trabajar juntos en este tipo de proyectos. El pueblo no tiene gas natural ni cloacas, pero estamos empezando a hacer estas obras en conjunto”, asegura Benso.

Este modelo de trabajo colectivo y solidario demuestra que, incluso en los pueblos más pequeños, la organización y el esfuerzo conjunto pueden transformar realidades. La visión de este grupo no solo está orientada a generar empleo, sino también a fortalecer el tejido social, creando un sentido de pertenencia y colaboración entre sus miembros.

Fuente: Elaboración propia a partir de entrevista realizada en el programa Argentinos en el Mundo, en Radio Argentina (Resistencia, Chaco).